Hablar de common-rail es hablar de Fiat ya que es la marca automovilística primera en aplicar este sistema de alimentación en los motores diesel de inyección directa. Desde 1986 cuando apareció el Croma TDI, primer automovil diesel de inyección directa del mundo. Se daba el primer paso hacia este tipo de motores de gasóleo que tenían una mayor eficiencia de combustión.
Gracias a este tipo de motores, podría garantizarse mayores prestaciones y menos consumos simultáneamente. Sin embargo quedaba un problema: el ruido excesivo del propulsor a bajos regímenes de giro.
Es aquí donde comienza la historia del Unijet, el estudio de un sistema de inyección directa más evolucionado, capaz de reducir radicalmente el excesivo ruido de combustión.
Para resolver el problema, solo había dos posibilidades:
- Aislar el motor para impedir la propagación de las ondas sonoras.
- Trabajar de modo activo para eliminar el inconveniente en la fuente, desarrollando un sistema de inyección capaz de reducir el ruido en la combustión.
Evidentemente, decididos por la segunda opción, los ingenieros del grupo Fiat en concentraron en la idea del principio del "Common-Rail".
Y... nacido de la Universidad de Zurich y nunca aplicado anteriormente en ningún automóvil, el principio teórico sobre el que se inició el trabajo era simple y genial al mismo tiempo.
Con la introducción de gasóleo en el interior de un depósito, se genera presión dentro del mismo depósito, que se convierte en acumulador hidráulico ("rail"), es decir, una reserva de combustible a presión disponible rápidamente.
En 1990 comienza la prefabricación del Unijet, el sistema desarrollado por Magneti Marelli, Centro de investigación Fiat y Elasis sobre el principio del "Common-Rail". Esta fase concluye tan solo en 4 años, cuando en 1994 Fiat Auto decidió seleccionar un socio con la máxima competencia en el campo de los sistemas de inyección para motores diesel. El proyecto fue cedido a Robert Bosch para la parte final del trabajo, es decir, la industrialización.
Once años después del Croma TDI, en octubre de 1997, llegó al mercado otro automóvil record: el Alfa Romeo 156 JTD equipado con el revolucionario turbodiesel que aseguraba resultados impensables hasta ese momento. Los coches equipados con ese motor eran realmente silenciosos y mostraban, respecto a un motor de precámara análogo, una mejora media de las prestaciones del 12%, además de una reducción de los consumos del 15%.
En los motores tipo "Common-Rail" se divide la inyección en dos fases una preinyección, o inyección piloto, que eleva la temperatura y la presión en el cilindro antes de hacer la inyección principal para permitir así una combustión más gradual, y resultando un motor mas silencioso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario